Siempre es difícil elegir cual será la primera entrada… es tu carta de presentación, la tarjeta que vas a dar a tus posibles visitantes y de la que dependerá gran parte de el tráfico de tus visitas.
Blogs, herramientas de social media como HootSuite, la integración de éstas en dispositivos móviles, cómo sacar partido a tus medios web con AdSense (que a nadie se le ocurra crear la cuenta antes de tener visitas!!!), eran muchas las opciones… Hasta que me di cuenta de que me olvidaba del principio: Qué es la “dichosa empresa 2.0”??? Y para los que aún no lo tienen claro… ahora llega la 3.0!!!
Pues bien, la empresa 2.0 no es más que la integración de la bidireccionalidad y la intercomunicación en el mundo empresarial y en la web. Este cambio supone así mismo dos cambios básicos en la filosofía de las empresas.
El primero, referente a la intercomunicación y el feedback, es el punto clave de este cambio. Ya no se “dictan” Los cambios de arriba abajo, de un jefe a toda una organización empresarial, sino que el nutriente de estos cambios son los empleados y los consumidores. Escuchando a nuestros consumidores conseguiremos darles el producto que buscan.
El segundo punto es la bidireccionalidad web. Ya no sirve el utilizar tu web como un escaparate (que también) sino como un stand. Hemos pasado de mostrar nuestros productos a través del cristal a estar continuamente en una feria de exposiciones, en la que además de mostrar nuestro producto hemos de informar de sus características, atraer a nuevos clientes hacia nuestro stand y, como no, adaptarnos a nuestro mercado (y así conseguir lo que hemos señalado antes).
¿Y la integración de las redes sociales en nuestra empresa? ¿Es este el punto clave para convertirnos en Empresa 2.0?
Pues si y no. Como ya hemos dicho antes, los puntos clave son la intercomunicación y la bidireccionalidad. Ahora, esta bidireccionalidad, sin lo cual no hay comunicación, es mucho más fluida con la inserción de las redes sociales en nuestro entorno web. Es decir, el uso de Facebook, Twitter, Google + o de cualquier otra herramienta que nos permita registrar la opinión de nuestros consumidores o de nuestro público objetivo, hará que nuestro feedbak sea mayor y que tengamos una base sobre la que trabajar. Estas herramientas consiguen una mayor comunicación y colaboración entre los usuarios. De este modo, la información fluye con mayor facilidad y se enriquece, facilitando los procesos de innovación y mejora dentro de las empresas. Además de conseguir que nuestros clientes se sientan escuchados lo que revitaliza nuestra imagen de marca.
Y esta es la base de una empresa 2.0 (Más adelante hablaremos del uso y los peligros de las redes sociales)
¿Y la empresa 3.0?
La empresa 3.0 es un valor añadido que ni todas las empresas quieren ni son capaces de asumir. Este tipo de empresas tienen en cuenta lo que piensa y requiere el consumidor para ofrecer productos basados en los valores. Ya no hablamos de consumidores, sino de personas, que quieren que lo que eligen se adecue a sus gustos de consumo y a su ética y forma de actuar.
Esto quiere decir que además de la estructura de empresa 2.0 (intercomunicación y bidireccionalidad) debemos tener en cuenta que quieren nuestros clientes, proveedores y colaboradores, tener una política de puertas abiertas, no tener sueldos estratosféricos (en ningún escalafón de nuestro organigrama) sino estar enamorados de nuestro trabajo e invertir siempre en la formación y capacitación de nuestros empleados.
Volvamos a darle un poco de humanidad a los negocios….
En este mundo y en esta sociedad en la que todo se hace ratón en mano, sería genial que volviésemos a escucharnos unos a otros (aunque sea con el ratón en la mano y no con la mano de nuestros clientes) y humanicemos nuestras interactuaciones. Si conseguimos escuchar y ser escuchados ya iremos un paso por delante de nuestra competencia.
